domingo, 18 de julio de 2010

UltraRace 60 km, Chichiriviche de la Costa

A duras penas le ganamos a la lluvia. De hecho, en una parte del estrecho camino que va desde el Club Oricao hasta Chichiriviche de la Costa, Estado Vargas, se deslizaban unas piedras cerro abajo, primero hacia la vía y luego hacia el acantilado. No era un derrumbe como tal, pero sí parecía el inicio de uno. Frené el carro y vimos como cada vez bajaban piedras más grandes. En una pequeña pausa, no quedó otra que pisar el acelerador y salír de ahí con marcha hacia adelante porque retroceder era excesivamente impráctico y peligroso.


(Chichiriviche de la Costa en condiciones más benévolas.)

Continuaba el gran chaparrón. Afortunadamente, eran pocos los kilómetros que faltaban para llegar a nuestro destino. Eran como las 5 p.m. del viernes y muy probablemente fuimos el único carro no todo terreno que pasara por la vía hasta las 2 a.m. del día siguiente. Hasta esa hora tuvieron que esperar, desde el grueso de los participantes hasta algunos miembros de la organización, la limpieza y habilitación de la carretera.

Pero la aventura seguiría en pie y, a pesar de todos los inconvenientes, la carrera apenas se retrasaba una horita. Es más, el sol de la costa, que generalmente es inclemente desde que se asoma hasta que se esconde, parecía estar descansando detrás de las pocas nubes que quedaron sin vaciarse durante el palo de agua de la noche anterior.



En la salida fue un gusto reencontrarnos con compañeros de aventuras. Siento que éstas eran en gran parte las personas que debían estar ahí en ese momento. Unas fotos por aquí y otras por allá y, cuando nos venimos a dar cuenta, comienza a sonar la música de Vangelis. Mi primera reacción fue pensar que la estaba escuchando unos 40 días antes de tiempo.



A pocos metros de la salida estaba el primer río y no faltaron las distintas estrategias. Unos se quitaron los zapatos y cruzaron descalzos, otros se cubrieron los pies con bolsas y muchos simplemente lo atravesaron sin detenerse. Los de la carrera de 30km cruzarían ríos en cuatro oportunidades y los de 60km en ocho.



Eran unos 139 participantes. Los de las franelas blancas, unos 100 corredores, encararían 30 duros kilómetros mientras que los 39 restantes marcarían un precedente: participarían en el primer ultramaratón de Venezuela.


Chichiriviche de la Costa vive principalmente de la pesca y del turismo, pero una cosa sí está clara; siempre se encuentra de fiesta. Esta ocasión no fue distinta, a pesar de que muchos de los lugareños no entendían lo que estábamos haciendo ni mucho menos las razones o la "lógica" de cada uno de esos 139 locos o valientes. Hubo muestras de apoyo, pero principalmente expresaban curiosidad.



Luego de cruzar el primer río comienza lo bueno. A pesar de que el catire estaba un poco escondido, como mencioné antes, la humedad y el calor estaban a tope. El plan que previamente nos trazamos Mayde y yo era tomar la carrera como un simulacro de lo que será para nosotros nuestra meta en la UTMB del próximo mes, a pesar de la diferencia en las condiciones climatológicas y topográficas. Probaríamos algo del material, la comida, la bebida que usaremos en Chamonix y hasta el modus operandi para los avituallamientos.


Así que entre sube y baja, tierra y concreto, costa y montaña, llegamos a Puerto Cruz. En este punto se devolverían los de la carrera de 30km mientras que los otros seguirían hacia Puerto Maya y este mismo sitio representaría para ellos aproximadamente el kilómetro 45 durante el regreso.



Desde este lugar en adelante, el asunto se puso solitario. Seguimos avanzando y el calor aumentando. Como a eso de las 11:30 reviso el termómetro del reloj y me indica 40º C. Se había hecho esperar, pero cuando salió plenamente, el sol vino con todo. Hasta ese momento, Mayde venía muy bien, pero yo me sentía un poco forzado y ni siquiera habíamos llegado al punto medio. Le pedí que bajáramos un poco el paso durante esas horas de calor más intenso para poder intentar llegar con algo de fuerzas hacía el final de la carrera.


Arribamos a la mitad de la ruta, el punto donde daríamos media vuelta y nos regresaríamos por donde veníamos. Ahí había varios corredores que aparentemente habían tomado la determinación de retirarse. Yo llegué algo descompensado y, al verlos, se me bajaron los ánimos aún más. No obstante, estaba en ese puesto de control nuestra amiga Nayra y nos motivó bastante además de consentirnos un poco.

Como teníamos previsto, nos demoramos exactamente 10 minutos y salimos a cubrir la segunda parte de la prueba. A pesar de ese descansito y de haber comido y bebido abundantemente, yo no terminaba de recuperarme. Al terminar la primera subida, corrí el siguiente descenso a un paso bastante lento, aún para mí. Estaba al borde de los calambres. En estas carreras, he tenido bajones muy serios seguidos por altos incomprensibles. Así que apreté los dientes y me emparejé con Mayde hasta que más o menos resucitara. Como cuando iba en carro, o aceleraba o esperaba que cayera el derrumbe.

Conforme bajaba el calor, me iba recuperando. Será que por mi contextura de gordito sufro bastante cuando el termómetro está por lo alto. No siempre ha sido así, pero algo similar me pasó subiendo el Gran Col de Ferret durante la CCC del año pasado.

Lamentablemente, Mayde y yo no compaginábamos las pálidas. Yo mejoraba pero era ahora ella quien se sentía mal. Aunque seguíamos avanzando, el ritmo ya no era el mismo. En estas carreras nos ha pasado que el uno o el otro ha tenido momentos malos, es normal, pero después han habido ratos en que los dos hemos estado bien. En esta ocasión, rara vez estuvimos ambos sincronizados.

Ya faltando 15 kilómetros, llegamos al puesto de control de Puerto Cruz nuevamente. Preguntamos por la chica que iba de tercera y nos dijeron que le llevaba más de una hora a Mayde. También vimos a Guillermo Salas, un experimentado montañista, quien se había sentido mal y llevaba por lo menos 30 minutos en ese punto, creo que con ánimos de abandonar.


(Foto de Nairaly González)

Lo invitamos a que se viniera. Como nosotros veníamos a un ritmo consistente aunque un tanto lento y él es normalmente fuerte en subida, el asunto resultó positivo. A veces nos separábamos y a veces nos uníamos, pero lo cierto es que cruzamos la meta juntos y Guillermo tuvo el bonito gesto de dejar a Mayde pasar unos metros por delante de nosotros creo que en el cuarto puesto entre las damas.


Por nuestra parte, es la última carrera que hacemos en nuestra preparación para la UTMB. Dependiendo de cómo vaya la recuperación, planificaremos un par de largos más para cerrar este ciclo y comenzar el taper.



En total, terminarían 25 corredores y serían los "Finishers" del primer ultramaratón celebrado en nuestro país. Según el Garmin fueron 59,84 kilómetros con 3.012 metros de desnivel positivo y 3.002 de desnivel negativo. Desde acá felicito a todos los que participaron, desde Deisis Zarramera y José Miguel Zamora, los grandes vencedores de esta prueba, hasta los que dieron lo mejor de sí pero no pudieron terminarla.

Con esta carrera, altamente exitosa desde mi punto de vista, nace la historia de los ultramaratones en nuestro país (si estoy equivocado, por favor alguien que lo aclare) y aumenta el número de corredores venezolanos que han logrado terminar este tipo de aventura.

¡Esperamos con ansias conocer los próximos capítulos!

Félix

15 comentarios:

Unknown dijo...

Gracias por tu crónica, Félix. Felicidades a todos quienes se aventuraron en esta prueba.

Un saludo para Mayde y abrazos a ambos.

frewuill dijo...

Que buen cuento! felicitaciones! Fui ayer a tomar fotos, pero me tuve que devolver mas o menos a los 6 Kms después de Oricao, en una parte donde las camionetas sufrían un poco para pasar, pensé que ya era suficiente para mi carro.

Ya les falta poco!

Ilych Irausquin dijo...

Así es Felix, la aventura fue mayúscula desde que se comenzó a subir hacia chichiriviche en los vehículos por el tema de los derrumbes y deslaves en la carretera, pero nada somos unos guerreros y afrontamos con firmeza el reto, cuando llegaste a Pto Maya yo estaba destruido no seguiría, pero le gane al final la batalla a mi mente y continue, tenia que terminal, no había ido tan lejos a abandonar y así lo hice retome la ruta y finalice mi primer ultra, felicidades a todos...son unos duros en verdad....un abrazo

Gersi Tarazona dijo...

Que grato y esperado leer la cronica del primer ultra en el pais, ojala que este sirva de impulso para otras pruebas de este tipo en los tremendos excenarios de nuestra fantastica geografia. Felicitaciones a todos los que participaron, buen mes de ultras y de grandes alegrias, seguro vendran otras. Ya viene la fiesta de Chamonix para ustedes, espero estar invitado el proximo año.
Exito ultreros, felicitaciones por su nuevo logro.
Allez, allez.

Luis Pinto dijo...

Mil felicitaciones para tí y Mayde. Yo hice la mitad de esa distancia y terminé moribundo, parándome varias veces en la ruta, sintiendo que era físicamente imposible dar un paso más. Y esa experiencia personal hace que los admire más.

Exito en el UTMB!!!

Unknown dijo...

FELICITACIONES A AMBOS!!!! como SIEMPRE...que buenos los cuentos.. y las fotos tambien!! Un abrazo a los siempre super durisisimos.. y aprovecho para felicitar a Pedro por el evento....
la fans #1 de los lindossss!!! besos

Unknown dijo...

Para mi fue un placer ayudarles, y ahora mas feliz me siento sabiendo que les subi los animos. Felicitaciones a ambos. Un abrazo. Se les quiere.

Unknown dijo...

Ah y excelente resumen de la experiencia y las fotitos. Un abracito

Miguel dijo...

Hola, Felicidades por haber culminado los 60 y pico de la ultrarace!yo a duras penas termine la carrera corta, muy duro el clima!!! aunque no me conozcas yo sigo tu trayectoria de entrenamientos en miras al utmb! y aprovecho el momento para saber si es posible obtener el videito de tu autoria en el cual aparezco en roll estelar y robando camara, sin saberlo!! digo, para guardarlo como recuerdo de ese grato y emocionante momento de la partida.
Saludos, gracias
Miguel Uzcategui

Félix dijo...

Pedro,
Un abrazo. Gusto saber de ti.

Fru,
Sí, chamo, estuvo ruda la ruta del carro. Fuimos unos de los últimos en pasar el viernes antes del derrumbe.

Ilych,
Felicitaciones mi pana. Varios se quedaron ahí donde tú estabas cuando nos vimos, pero determinaste seguir y cumplir con tu meta. En estas carreras, por lo menos para mí, el crono y la posición pasan a un segundo lugar. Como dijo Rodeiro acertadamente: Llegar es ganar.

Gersi,
Esto es parte de la fiesta "ultramaratoniana" que encendiste tú y los amigos que fueron a la GTP. En tan sólo un mes se multiplicaron los finishers venezolanos de ultramaratones.

Luís,
Gracias y felicitaciones para ti también. Por cierto, el cacharro funcionó de maravilla y pude registrar las casi 12 horas de recorrido en el Garmin.

Luisita,
Un besote para ti. Gracias por estar pendiente desde la distancia.

Nayra,
Finísimo todo; sólo faltaron las birras, jeje. Un besote.

Miguel,
Con gusto te mando el video. Sólo házme llegar tu dirección por esta vía o Facebook o a través de la dirección de mail que aparece en mi perfil. Gracias por visitar el blog y felicitaciones por tu carrera.

DEISIS Z. dijo...

Que bonito felix, en esta carrera senti la calidad humana de cada quien, la disfrute muchisimo.. estube en la llegada, y cuando vi que ustedes venian me dio una inmensa alegria... todos desian ay viene felix y mayde..!!! De corazón los felicito y les deseo la mejor de las suerte en su proximo reto.. y se que lo lograran porque son luchadores.. un fuerte abrazo...!!

Félix dijo...

¡Épale Deisis! Ha sido bonito verte ir cada vez más rápido y cada vez más lejos últimamente. Un premio a tu consistencia y ganas de mejorar. Qué victoria tan merecida. Gracias por tu bonito comentario.

fotosbikesport dijo...

Hola Felix y Made, muy bueno el cuento del recorrido como siempre, por lo menos pude hacer el recorrido en tú narrativa..
El mismo espíritu para el UTMB..
Un abrazo para ambos..
Sigfredo.

Félix dijo...

Sigfredo,

Lamento mucho las pérdidas materiales que tuviste, pero es realmente inspiradora la actitud que tomaste frente a todos los hechos. Eres una de esas contadas personas que, sin caer en cursilerías ni falta de autenticidad, siempre anda positiva y tiene algo bueno que decir.

Otra vez, felicitaciones por la publicación de tu foto en prensa y esperamos ver más de tu excelente trabajo por ahí en los medios.

Unknown dijo...

Ruta excelente desde Montesano hasta cHichirivichi, en Bici son 45 k, en 2 horas. Pero con las lluvias hay muchos obtaculos.Extrema